Presentación de libro: El retorno y otras nocturnidades, de Ney Antonio Salinas Domínguez.
Reseña Acá abajo:
Recientemente se ha publicado de forma independiente el primer volumen de cuentos del escritor chiapaneco Ney Antonio Salinas Domínguez "El retorno y otras nocturnidades". Este es un libro de bastante interés para el mundo de la literatura moderna Chiapaneca. En breve se publicará una reseña. En esta ocasión, transcribimos las palabras del autor en las dos primeras presentaciones que se han realizado en Septiembre en la hermosa ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
(Ney Antonio Salinas Domínguez)
Bienvenidos
todos los que aquí concurren, en esta hora y en este lugar.
Bienvenidos todos los que están aquí sin estar presentes.
Enhorabuena, porque la literatura sigue siendo motivo de reunión y
de calor humano; considerando pues que la pasión es uno de los
pilares sobre los que el arte se sostiene y se sustenta en medio de
la noche de nuestros tiempos, entonces, el motivo de pasión en esta
velada se llama “El retorno y otras nocturnidades”. Libro que
contiene un itinerario de vigilias y una analogía de nuestras
tragedias. Historias narradas desde la ficción y que ocurren en la
noche de Chiapas y del mundo.
El
tema de la noche en la literatura y el cine es normalmente
interpretado como terror, miedo, decadencia; es decir, una analogía
de nuestras antiguas y recientes colecciones de temores y
supersticiones. También, la noche está hermanada al misterio, y es
esta senda la que recorre “El retorno y otras nocturnidades”,
como un acto de resistencia, o un acto de exploración ejercido en
ese misterio de la vida que acontece durante la noche que padecemos,
intenta contemplarse a sí misma, en la bitácora de nuestro dolor
para sobrevivir la noche.
Y
la noche en si tiene su propio misterio que se corresponde con
nuestros tiempos. Es muy señalada la noche que comenzó con el
colapso de la civilización clásica y que terminó con los primeros
destellos de luz traídos por el Renacimiento italiano.
Entonces
podemos citar a James M. Cain: “El
diablo no quedó defraudado aquella noche”. De
su novela: EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES
Y
también podemos tener fe;
La
literatura, el arte, la ciencia, la cultura, la fraternidad, son los
últimos asideros del hombre ante el abismo.
En
mi caso, puedo convenir que el motivo principal para este libro se
concentra en estas razones:
- El hecho de contar nuestras historias desde la narrativa que busque la comunión entre narrativa y poesía, siendo nuestra geografía pródiga en poetas y demás admirables especies.
- Contribuir en la humilde y ardua tarea de posicionar a Chiapas, dentro de la geografía literaria nacional, como un tema de importancia literaria y cultural, más allá de que habitemos el doloroso Sur de nuestra lastimada república.
[Leído
el 05 de Septiembre de 2013 en la Cafebrería “Los Artistanos”,
en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas: Presentación de “El
retorno y otras nocturnidades”.]
Bienvenidos todos
los que aquí concurren, en esta hora y en este lugar. Bienvenidos
todos los que están aquí sin estar presentes. Enhorabuena, porque
la literatura sigue siendo motivo de reunión, de regocijo, de
crecimiento y de calor humano; y considerando pues que la pasión es
uno de los pilares sobre los que el arte se sostiene y se sustenta en
medio de la noche de nuestros tiempos, nuestro motivo aquí se llama
PALABRA, desde el sur, hacia el sur, en el sur. Aquí concurro con
este libro, “El retorno y otras nocturnidades”. Libro que
contiene un itinerario de vigilias y una analogía de nuestras
tragedias. Historias narradas desde la ficción, que ocurren en la
noche de Chiapas y del mundo.
El
tema de la noche en la literatura y el cine es normalmente
interpretado como terror, miedo, decadencia; es decir, una
aproximación a nuestras antiguas y recientes colecciones de temores
y supersticiones. También, la noche está hermanada al misterio, y
es esta senda la que recorre “El retorno y otras nocturnidades”,
como un acto de resistencia, o un acto de exploración, ejercido en
ese misterio de la vida que acontece durante la noche que padecemos,
e intenta contemplarse a sí misma, en la bitácora de nuestro dolor
para sobrevivir la noche.
Y
la noche en si tiene su propio misterio que se corresponde con
nuestros tiempos. Es muy señalada la noche que comenzó con el
colapso de la civilización clásica y que terminó con los primeros
destellos de luz traídos por el Renacimiento italiano.
Entonces
podemos citar a James M. Cain: “El
diablo no quedó defraudado aquella noche”.De
su novela: EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES
Y
también podemos tener fe;
La
literatura, el arte, la ciencia, la cultura, la fraternidad, son los
últimos asideros del hombre ante el abismo.
Cabe
preguntarse si el hombre tiene esperanzas de resistir. Y podemos
responder con palabras de Roberto Bolaño; yo soy de los que creen
que el ser humano está condenado de antemano a la derrota, a la
derrota sin apelaciones; pero que hay qué salir y dar la pelea,
además, de la mejor forma posible, de cara y limpiamente, sin pedir
cuartel, porque además no te lo darán, e intentar caer como un
valiente y que eso es nuestra victoria.
A
mitad de la noche, con nuestras historias al hombro es cuando el
silencio nos pone a prueba, y la palabra funge como la única posible
tabla de salvación. Así, surge “El retorno y otras
nocturnidades”, estructurado por catorce narraciones que provienen
del centro mismo de la noche, y en sus páginas existe una cita con
la poesía, no sólo por el escenario geográfico en que nos
encontramos, sino como un acto de comunión y resistencia.
Estamos
aquí por la PALABRA, eso, lo es todo. Y no importa que nos citemos
aquí, en el doloroso sur de nuestra vejada república por políticos
analfabetas y sus reformas infames. Porque pese a la oscuridad de
nuestros tiempos, siempre será loable encontrarnos y reconocernos
siempre en el sur, “Al Sur de la Palabra”.
[Leído
en el Séptimo Encuentro Nacional de Literatura “Al Sur de la
Palabra”. San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, el día 19 de
Septiembre de 2013.]